«Sergio Prim, geógrafo de profesión, ha visto cómo su sueño de amor por Brezo Varela se cumplía y ha sentido pánico».
Magnífico resumen de una novela que nos sitúa en el sufrimiento de una persona que tiene miedo de la vida, miedo a vivir.
Un estilo barroco, con un uso de los adjetivos radicalmente propio, pero con el acierto de transmitirnos con exactitud sentimientos y vivencias desconocidos para alguien como yo. Un estilo a veces excesivo. Hay que dejarse llevar, a veces perder pie.